10 Maneras de cocinar con limones
1. Invierta en un Zester
Si le gusta el sabor del limón, los risottos y las salsas, un zester eliminará la piel en tiras finas y apetecibles.
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2. Cubra la pasta para una deliciosa cena
Combine la ralladura y el jugo de un limón con cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra, un pimiento rojo (sin semillas y finamente picado) y un diente de ajo finamente picado. Mezcle el aceite con sabor a través de pasta cocida y sirva con un puñado de perejil picado, rúcula y parmesano rallado.
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3. Hacer limonada casera
Ponga una taza de azúcar en una olla pequeña con media taza de agua. Llevar a ebullición a fuego alto, luego baje la temperatura y cocine a fuego lento durante unos minutos. Retire del fuego, deje enfriar, luego agregue el jugo de dos limones. Sirva su limonada, diluida con agua mineral gaseosa fría al gusto.
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4. Almacenarlos en el congelador
Congele y guarde el jugo de limón en bandejas de cubitos de hielo para esos momentos en los que necesita solo una pizca de cítricos.
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5. Saborea tu carne
Rocíe jugo de limón sobre ternera frita, cordero asado o pollo asado, o marque las piezas de pollo en jugo de limón, aceite de oliva y algunas hojuelas de chile seco y orégano justo antes de asar en la barbacoa.
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6. Agregue un poco de Tang al risotto
Agregue una pizca de jugo de limón a risottos de pollo o marisco para una mordida fresca y picante.
Pruebe una de nuestras deliciosas recetas de risotto.
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7. Haz una vinagreta simple
Combine una cucharada de jugo de limón con tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Sazone con un poco de sal marina y pimienta quebrada y agregue un diente de ajo magullado. Deje reposar durante 10 minutos, quite el ajo y rocíe sobre una ensalada verde.
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8. Aligera tu cena
Agregue finas rodajas de limón a una ensalada de aragula para obtener un acompañamiento ácido que equilibrará una rica comida.
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9. Agregue una cuña de gusto
Vierta un poco de jugo de limón en las salsas o pastas compradas en la tienda para obtener un delicioso saborizante.
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10. Sé indulgente y haz algo de cuajada
Ponga 3/4 de taza de jugo de limón en una cacerola de base pesada y agregue 100 g de mantequilla sin sal y 3/4 de taza de azúcar en polvo. Revuelva constantemente a fuego medio hasta que el azúcar se haya disuelto. Retire la cacerola del fuego y mezcle con tres yemas de huevo. Regrese al fuego y bata ligeramente hasta que la cuajada se espese (no deje que hierva). Vierta en un frasco esterilizado y, cuando esté frío, guárdelo en el refrigerador.
Sirva la cuajada simplemente con pan tostado o brioche caliente; untar sobre bizcocho y cubierto con crema batida y fruta de la pasión; o doblado a través de queso mascarpone y servido en tazones pequeños con biscotti.
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